¿Por qué no lo mando a la mierda? Pensé el otro día...
Y recordé ésto:
El uso de la palabra MIERDA, es una cuestión de educación.
Ya que nadie puede negar que la usamos para múltiples circunstancias relacionadas con muchísimas cosas, por ejemplo:
- Ubicación Geográfica: Andate a la MIERDA.
- Adjetivo Calificativo: Sos una MIERDA.
- Momento de Escepticismo: No te creo una MIERDA.
- Deseo de Venganza: Lo voy a hacer MIERDA.
- Accidente: Se hizo MIERDA.
- Efecto Visual: No sé ve una MIERDA.
- Sensación Olfatoria: Huele a MIERDA.
- Deseo al Despedirnos: Váyanse a la MIERDA!!!
- Especulación del Conocimiento: ¿Qué MIERDA es esto?
- Momento de Sorpresa: A LA MIERDA!!!
- Actitud de Resentimiento: No me regaló una MIERDA.
- Sensación Gustativa: Esto tiene gusto a MIERDA.
- Acto de Impotencia: ¡No se me para esta MIERDA!!!
- Deseo de Animo: Apúrate con esa MIERDA!!!
- Situación de Desorden: Todo está hecho una MIERDA.
- Rechazo Despectivo: ¿Qué se cree la MIERDA esa?
- Alquimista: Todo lo que toca se vuelve MIERDA.
Como nos arreglaríamos sin ésta palabra?
Y si este post no te gusta…ya sabes…tiralo a LA MIERDA.
Roberto Fontanarrosa
0 comentarios:
Publicar un comentario